Luego, el imputado Álvarez pidió declarar y sostuvo que él no tenía ninguna relación con el ex comisario García, quien lo había comprometido en sus respectivas declaraciones testimoniales.
Por su parte, el abogado Galdames pidió la absolución de Domínguez por el beneficio de la duda y sostuvo que Gabarraz fue “inducida” por la fiscalía para reconocerlo en la rueda de presos como quien le disparó a la víctima.
A su turno, la defensora Lema solicitó al tribunal de Malaespina la absolución de Álvarez por considerar “nula” la nueva acusación en su contra, en tanto que no tuvo que expedirse sobre “Beto” Barrera ya que el fiscal Bazán no lo había imputado en su alegato.
Por último, el representante del Ministerio Público decidió ampliar los fundamentos de su acusación y señaló como posibles móviles del crimen los intereses de los dueños de Comapresa, como así también los del ex socio de la víctima. También mencionó la posible vinculación de la droga y la política, tal como lo había deslizado la testigo Cortés, pero aclaró en ese sentido que la candidata presidencial no había portado pruebas en ese sentido.
Respecto de Araujo Castillo habló de la “traición” que pudo haber sentido el empresario cuando Espinoza se fue de la firma para iniciar su propio negocio y sobre Rosas indicó que la víctima habría descubierto que su socio metió “la mano en la lata”.
“A lo largo de la instrucción de este homicidio, la primera hipótesis delictiva hacia Domínguez y Barrera fue dirigida e intentaron sustentarla con pruebas falsas. Por lo que uno de los fines de este juicio oral y público es fundar una plataforma imparcial y auténtica que permita llegar a la verdad. Y por sobre todo llevar justicia en el homicidio de Espinoza”, sostuvo el fiscal.
Para Bazán existieron “maniobras policiales o judiciales para ocultar o disfrazar la verdad” y que “quizás hubiera resultado más fácil darle la razón a aquellos que pusieron a Domínguez, a Barrera, a Araujo Castillo, como partícipes del crimen”.
“Pero si me dan a elegir entre buscar la verdad y tener razón, no dudo que en este trabajo, la prioridad y mi deber es buscar la verdad”, continuó.
Y puso como ejemplo que “las pericias científicas de ADN y huellas digitales no permiten ligar el arma y el proyectil hallados en la calle al día siguiente del homicidio con el crimen ni con los autores, por lo que crece la sospecha de que fueron plantados”, concluyó.
Tras la exposición del fiscal, el tribunal pasó a un cuarto intermedio hasta la tarde, cuando los imputados pronunciaron sus “últimas palabras”.
Domínguez y Barrera fueron muy breves y sólo sostuvieron "somos inocentes", en tanto que Alvarez leyó una nota en la que se refirió a la participación en el hecho de su supuesto hermano y sus cómplices e intentó desacreditar la declaración del ex comisario que lo involucró. "Soy inocente y creo que en la Justicia", concluyó.
Finalmente, los jueces establecieron que el 24 de agosto se conocerá el veredicto.